Mantén una sola tarjeta de crédito y una sola cuenta corriente

A lo largo del tiempo, vamos acumulando tarjetas de crédito y cuentas corrientes por distintas circunstancias: nos “regalan” una tarjeta de crédito y la aceptamos, abrimos cuentas conjuntas con amigos, parejas, etc. Y para cuando nos queremos dar cuenta, es un lío llevar un control de todas ellas y los gastos por mantenimiento se multiplican.

Muchas cuentas corrientes y tarjetas se anuncian muy atractivas al principio (ofrecen regalos, están libres de gastos,...), pero al cabo de un tiempo, vemos que las condiciones no son tan buenas como parecían en un primer momento.

Mi consejo es tener sólo una tarjeta de crédito y una sola cuenta corriente, lo que nos permitirá hacer un seguimiento fácil de los movimientos de la cuenta y de nuestros gastos, y evitará muchas comisiones por mantenimiento de cuentas, por renovación o emisión de tarjetas, etc.

Además, si tenemos una sola cuenta corriente en la que tenemos domiciliada la nómina y los recibos, y hacemos un uso normal de la tarjeta, tendremos más poder negociador con el banco para conseguir la eliminación de todo tipo de comisiones. Nuestra cuenta y nuestra tarjeta serán más interesantes que si tenemos nuestros ingresos repartidos entre varios bancos.

Realmente, sólo necesitamos una cuenta y una tarjeta, y si las sabemos gestionar bien, nos serán muy útiles para nuestra vida.

Foto | Flickr de Andrés Rueda
En Ahorro diario | Quítate el hábito de las tarjetas de crédito, Aprende a usar la tarjeta de crédito, Quitate las comisiones de mantenimiento de las tarjetas

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