Altavoces grandes y potentes para montar una fiesta en la playa: consejos de compra y modelos destacados

El verano es época de salir a la calle a disfrutar del buen tiempo y precisamente la playa es uno de esos lugares elegidos, no solo para tomar el sol y darnos un baño, sino también para reuniones de amigos, algo de deporte, un picnic informal e incluso fiestas tan populares como las hogueras de San Juan que dan la bienvenida a la estación. Y qué sería de las fiestas sin música.

Afortunadamente, para llevarte la música a cualquier parte solo hace falta un teléfono móvil. Pero para que sea una fiesta de verdad necesitas algo más para que la música se haga notar. ¿Y qué mejor que un altavoz Bluetooth? Aunque estamos acostumbrados a gadgets compactos, también los hay de mayor tamaño y potencia, capaces de amenizarnos cualquier evento. A continuación, algunos factores a tener en cuenta a la hora de comprar un altavoz Bluetooth grande y potente y modelos recomendados para llevarte a cualquier parte.

Buscando el altavoz Bluetooth perfecto para una fiesta en la playa

A la hora de elegir un altavoz Bluetooth normalmente nos dejamos llevar fundamentalmente por el precio. Después de todo, podemos encontrar una amplia selección por menos de 50 euros, incluso encontrando algunos de ellos bastante potentes para ese precio.

No obstante, cuando buscamos un altavoz grande y potente para la playa, nos queda claro que factores como la potencia y la resistencia al agua y la arena han de ser fundamentales, no solo para garantizar que la música se escucha bien, sino para evitar disgustos inevitables en un entorno húmedo y lleno de arena.

Potencia

La potencia es un parámetro que nos puede llevar a error a la hora de elegir un altavoz, ya que en algunos casos los fabricantes ofrecen la potencia pico, que es un valor puntual, en lugar de la potencia nominal.

Ambos valores se miden en Watios pero mientras que el primero se refiere a un valor puntual, el segundo proporciona valor máximo que admite el altavoz cuando se encuentra en condiciones óptimas de reproducción. Así que cuanto mayor sea la potencia nominal, el sonido será más alto y claro. Para usarlo como equipo amplificador para una fiesta en la playa o eventos similares, al menos debería alcanzar los 50 Watios.

Resistencia al agua y el polvo

Para evaluar la resistencia frente a los líquidos y los sólidos en gadgets se emplean los códigos IP de la International Electrotechnical Commission, que los estandariza con una batería de pruebas de forma que tengamos claro sus límites.

La estructura es la siguiente: tras IP encontraremos dos cifras. La primera de ella será el nivel de protección frente al polvo y la segunda cifra indica la protección frente al agua. Cuanto mayor sea la cifra, más resistente será.

La tabla IP queda de la siguiente manera:

• IP0X: sin protección especial.

• IP1X: protegido contra los objetos sólidos >50 mm de diámetro.

• IP2X: protegido contra los objetos sólidos >12,5 mm de diámetro.

• IP3X: protegido contra los objetos sólidos >2,5 mm de diámetro.

• IP4X: protegido contra los objetos sólidos >1 mm de diámetro.

• IP5X: protegido contra el polvo; entrada limitada (sin depósitos dañinos).

• IP6X: protección completa frente a polvo.

La cifra de la resistencia al agua tiene mayor rango:

• IPX0: sin protección especial.

• IPX1: protegido contra el agua vertida.

• IPX2: protegido contra el agua vertida cuando está inclinado hasta 15 grados con respecto a su posición normal.

• IPX3: protegido contra el agua rociada.

• IPX4: protegido contra las salpicaduras de agua.

• IPX5: protegido contra el agua en chorros a presión.

• IPX6: protegido contra chorros a alta presión.

• IPX7: protegido contra los efectos de la inmersión.

• IPX8: protegido contra inmersión a cierta profundidad, especificada por el fabricante, y típicamente hasta 3 metros.

En nuestro caso, lo fundamental será que el altavoz esté protegido frente a la arena, que tiene un diámetro que va desde los 0,06 milímetros hasta los 2 milímetros. Consideraremos que no vamos a usarlo dentro del agua, pero sí que podría sufrir la exposición a alguna salpicadura.

Otros parámetros a tener en cuenta

• Rango de frecuencias. Indica la horquilla de frecuencias que reproduce el altavoz. Cuanto más amplio, mejor.

• La impedancia es la resistencia que el sistema opone a la corriente. Cuanto menor sea, mejor. Un buen equipo tiene una impedancia baja.

• Con los altavoces inalámbricos suele suceder que la ligereza y portabilidad son factores deseados, sin embargo un equipo liviano y pequeño se traduce en que las prestaciones acústicas son menores, ya que se emplean materiales diferentes en carcasa y drivers. En este caso, será necesario buscar un compromiso entre un tamaño lo suficientemente grande pero transportable.

• De hecho, el volumen máximo será una combinación de la potencia con la impedancia, el tamaño de la caja y la distancia al altavoz a la que nos encontremos.

• Número de canales y tamaño de los drivers. Lo frecuente es encontrar sistemas 2.0 o 2.1, si bien dependerá del tamaño de los drivers y si son pasivos o activos. Este aspecto influye en la reproducción de graves.

• Conectividad: Teniendo en cuenta que vamos a encontrarnos en el exterior, lo más cómodo y recomendable es que la conexión se realice mediante Bluetooth, siendo esta tecnología la más empleada. No obstante, con una toma jack de 3,5 mm bastaría para que se conviertan en unos altavoces normales con cable. También hay otras opciones como el NFC, que emparejan fácilmente ambos dispositivos solo con acercarlos.

• Asumiendo que el Bluetooth es lo más popular, en el mercado encontraremos varios tipos y perfiles. Actualmente lo normal es encontrar estándares 4.0 o superiores, lo que se traduce en mayor alcance y eficiencia energética. En cuanto a perfiles, el A2DP es el más extendido para transmitir audio vía Bluetooth. Si buscas un altavoz Bluetooth con máxima calidad de sonido, el códec APTx es ahora mismo el que mejor comportamiento ofrece, si bien el SBC es el más común, con un bitrate de 320 kbps en estéreo suficiente para música en streaming.

• Autonomía. La duración de la batería de un altavoz es clave, especialmente teniendo en cuenta que vamos a trasladarlo a espacios en los que no hay tomas de corriente eléctrica. No obstante, se trata de un parámetro muy variado en función del tipo de conectividad o el volumen. 10 horas de autonomía a un 50% de volumen es un valor exigible a estos equipos.

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