Estando como estamos ya en pleno periodo veraniego con altas temperaturas y un fuerte sol es más que normal el querer andar bebiendo siempre líquido, de hecho es lo más aconsejable. Los expertos recomiendan la ingesta de 2 litros de agua diarios y esto se hace más patente en estos días que evacuamos muchos más líquidos.
El problema de tanta sed es que pueden llegar a ser un problema para nuestro bolsillo. En el trabajo nos podemos ver tentados de ir a la máquina a por una lata o bajarnos a la cafetería a tomarnos algo. Por la calle es posible que no tengamos más remedio que pararnos en algún bar o de nuevo recurrir a alguna máquina.
Podría pensarse que se trata de gastos de muy poca cantidad, de 1 o 2 euros diarios y que no van a ninguna parte, imáginate eso en forma de 30-60 euros en un mes, seguro que preferiríamos gastar ese dinero en algún otro capricho del que nos estamos privando porque es caro o directamente preferimos ahorrarlo en nuestra cuenta.
Además todo esto es tan fácilmente solucionable como cargar con una botella de agua que podremos ir rellenando en casa, en la fuente del trabajo, donde estudiemos, etc. No me cansaré de repetir que el secreto del ahorro está en estos pequeños hábitos.
Imágen | Killian Sanchez