Cuando escuchamos la palabra costurero, imaginariamente retornamos a nuestra infancia, cuando jugando al fútbol con nuestros amigos teníamos alguna caída y se rompía el pantalón por las rodillas, y nuestra madre le cosía un parche para prolongar la vida de este.
Hoy en día rara vez se produce esta situación, siguiendo una cultura de usar y tirar sin caer en la cuenta de estas pequeñas costumbres, que nos permiten sacarle mayor jugo a las cosas que comprarnos y no gastar dinero en cosas por no haberlas aprovechado lo suficiente.
Tal vez en esta época de crisis tengamos que echar la vista atrás, y retomar ciertos hábitos y costumbres que utilizaban nuestros mayores en tiempos de dificultad. ¿Por qué no hacerlo? Como pueden ver, el costurero no está pasado de moda.
Imagen | andresrueda
En Ahorro Diario | Tu vieja camisa como nueva