Uno de los factores decisivos para aprender a gastar con cabeza es alejarse de las tarjetas de crédito. Ayer mismo conocíamos que en España, con la crisis, ha descendido el uso que se hace de ellas y es lógico: ahorrar es mucho más fácil si no dependemos de dinero que no tenemos para gastar.
Lo fundamental, pues, es quitarnos del hábito de utilizarlas. No siempre es sencillo, sobre todo si se tiene mucha dependencia de su uso. Veamos unas cuantas estrategias para que nos resulta más fácil acabar con la compra a través de tarjetas.
¡Cuidado!, publicamos esta oferta hace más de dos semanas, y el precio puede haber cambiado. Para no perderte ninguna oferta, suscríbete a nuestro Telegram, Twitter o síguenos en Facebook con Compradicción (con todas las ofertas) y Compradicción Lifestyle (solo con las ofertas de Moda, Belleza, Deco, Deportes y Bebés) y las recibirás en cuanto las descubramos.
- Comprobar nuestro situación: Lo hemos comentado en varias ocasiones, es fundamental que sepamos cuál es nuestra situación económica. Coge todos los recibos del banco, accede a tus cuentas a través de internet y suma hasta que sepas de cuánto dinero real dispones.
- Hazte un presupuesto: Planifica y gasta según lo contemplado en tu plan. Hasta en las compras diarias no te salgas ni un ápice de lo que hayas planeado en casa. Si es necesario, sal con el dinero justo.
- Para las compras que te pidan tarjeta, usa la de débito: La diferencia está entre pagar a final de mes (o del plazo acordado con el banco) o hacerlo al instante. No es sólo que te quites de los intereses, sino que verás evolucionar en tiempo real tu situación económica, de manera que siempre estarás gastando en base a lo que tienes y no te encontrarás sorpresas cuando llegue el cargo de la tarjeta y se ajuste de nuevo tu presupuesto.
- Usa el sistema del sobre: Presupuesta tu mes por áreas y elabora un plan de cómo vas a gastarlo. Saca todo el dinero correspondiente del banco y repartelo en diferentes sobres para cada área de gastos. Apunta la cantidad inicial fuera del sobre y después todos los gastos que vayas haciendo. Guarda en cada sobre los tickets correspondientes. Trata de conseguir que cada semana sobre dinero y aparta lo que ahorres en otro sobre diferente. A final de mes, decide si lo que ha sobrado lo dedicas a pagar tu deuda o lo transfieres a tu cuenta de ahorros.
Si conseguimos controlar el gasto hecho a crédito, notaremos que nuestro dinero se estira más.
Vía | NCN
Foto | Andrés Rueda en Flickr
En Ahorro Diario | Aprende a usar la tarjeta de crédito