Hace una semana que lo de entrar a un supermercado y no ver postres navideños a la venta se ha vuelto muy complicado. Pasa todos los años, sí, y las quejas de por qué cada vez la Navidad llega antes a las estanterías se suceden una vez más. Luego claro, vemos una oferta interesante en turrones y nos quedamos pensando ¿y si los compro ahora, ya quedan, y me ahorro unos euros?
Y nos quedamos mirando durante un rato largo esos carteles que ponen en letra grande 'oferta' y que al final van a conseguir convencernos de ello. Luego pasan unos días, nos entra el hambre, echamos un ojo a lo que hay en la cocina y... terminamos por atacarle al turrón o a los mazapanes, empezando por uno hasta que no quede nada. ¿No se suponía que había que guardarlos?
Seguro que nos habrá pasado más de una vez y nos seguirá pasando, por eso es conveniente no ponernos a comprar postres navideños de manera compulsiva pensando que estamos ahorrando cuando a la larga no va a ser así. ¿Vamos o no vamos a tener fuerza de voluntad?
Imagen | Lablascovegmenu En Ahorro diario | Mercadona mejora la calidad, ¿es ahora una opción más interesante?