Actualmente son prácticamente la totalidad de las compañías de bajo coste las que cobran un precio especial por facturar las maletas. Contra esto tenemos la opción de no facturar ningún equipaje. El problema de esto es que el equipaje de mano se encuentra bastante limitado.
No obstante existen formas de conseguir que en este espacio reducido pueda viajar todo lo necesario. Lo primero es contar con una mochila o maleta que este dentro de las medidas dictadas por la compañía de viaje, pero que no sean mucho menores. Una de las compañías más restrictivas en este aspecto es Ryanair y estás son las medidas que permite: 55 × 40 × 20 cm.
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Podemos tratar de reducir un montón de elementos. Por poner un ejemplo, podemos llevar una toalla de montaña que son mucho más pequeñas, finas pero que además pueden secar del mismo modo. Para viajes largos en lugar de llevar ropa para todos los días podemos llevar mucha menos y llevarla a lavanderías donde en un par de horas nos entregarán la ropa limpia y seca.
Es importante también hacernos con unos cuantos botes de menos de 100ml para transportar champú, gel y demás efectos de higiene, puesto que no nos permitirán introducir en el avión una mayor cantidad de líquidos.
Con todos estos conejos y los que se os ocurran a vosotros estoy totalmente seguro de que podremos reducir nuestro equipaje de mano para cumplir dichas normas. Con esto no sólo ahorraremos unos cuantos euros si no el tiempo de facturar el equipaje y de recogerlo a su llegada.
Imágen | Jon Gos