¿Y si desaparece el sistema de pensiones?

¿Y si desaparece el sistema de pensiones?
Facebook Twitter Flipboard E-mail

En la época de crisis en la que nos encontramos, parece que una de las mayores preocupaciones de la mayoría de trabajadores es tratar de mantener el nivel de vida cuando llegue la jubilación con el riesgo que corremos de que el sistema de pensiones actual pueda dejar de existir. ¿Qué pasará entonces? ¿Deberíamos estar preparados para ello?

Desde Consumer ofrecen una lista con las cinco formas que resultan ser en este momento las más populares para ahorrar e intentar conseguir ese objetivo. Os los enumeramos y podéis comentarnos qué opción os resulta la mejor.

¡Cuidado!, publicamos esta oferta hace más de dos semanas, y el precio puede haber cambiado. Para no perderte ninguna oferta, suscríbete a nuestro Telegram, Twitter o síguenos en Facebook con Compradicción (con todas las ofertas) y Compradicción Lifestyle (solo con las ofertas de Moda, Belleza, Deco, Deportes y Bebés) y las recibirás en cuanto las descubramos.

Ver últimas ofertas de otros »

  • Planes de pensiones: para realizar aportaciones periódicas durante la vida laboral y contar con respaldo cuando cumplan la edad de retirarse. Se cobra en el momento en que la persona se jubila. Hay varios planes, en función del tiempo que están vigentes y del riesgo que corre el capital ingresado.

  • Fondos de inversión: productos de inversión colectiva en los que los partícipes aportan sus ahorros a un fondo común y este patrimonio lo administra una sociedad gestora. La principal ventaja del fondo de inversión es su elevada liquidez, ya que el cliente puede hacer suscripciones y reembolsos en todo momento. Y en el plazo de tres días hábiles, el titular tendrá su dinero.

  • Planes de Previsión Asegurados: similares a los planes de pensiones, pero brindan una rentabilidad mínima en la inversión que realiza el titular, además de garantizar el capital invertido. La ventaja de los PPA radica en que ofrecen una rentabilidad que puede oscilar entre el 2,5% y el 4%. El inconveniente es la falta de liquidez.

  • Planes Individuales de Ahorro Sistemático: es un seguro de vida cuyo titular acumula su capital para después recuperarlo en forma de renta vitalicia. Estas mensualidades pueden empezar a cobrarse cuando transcurran 10 años desde que se abonó la prima inicial. La aportación máxima anual a un plan individual de ahorro sistemático es de 8.000 euros y la cuantía acumulada no puede superar los 240.000 euros.

  • Depósitos a plazo fijo: garantiza el capital y un interés normalmente prefijado. Cuenta con gran liquidez, aunque con penalización en muchos casos si se saca el dinero antes de lo acordado.

¿Lo habéis pensado ahorradores? ¿Por cuál os decantaríais?

Imagen | JhoanDeath Vía | 20minutos

Comentarios cerrados
Inicio