Hoy os quiero proponer una alternativa lúdica que, por desgracia, no está tan extendida como se merece: los juegos de rol. Quizás por desconocimiento, o por estar ligados desde su nacimiento a los comics, la fantasía y la ciencia ficción, es muy común el tener una visión completamente equivocada de este pasatiempo, como si fuera algo “de frikis”.
El rol no es más que un juego de mesa, con una serie de reglas, unos objetivos para lograr el éxito, y con un toque de azar. Es sólo que este juego es tan grande, que casi no tiene límites, y eso es lo que lo diferencia de los juegos de mesa clásicos. Para empezar, en el rol los jugadores no compiten: colaboran para llegar a buen término. Y el trascurso de una partida depende de la imaginación de los jugadores, y no tanto del azar.
Pero, ¿qué es el rol? No es más que jugar a interpretar una obra de teatro, en la que el guión sólo está esbozado. El director presenta a los jugadores un escenario, que no tiene por qué ser de fantasía, y los jugadores deben imaginar qué podrían hacer sus personajes para resolver la situación, combinando lo mejor que cada uno puede ofrecer.
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Es, desde luego, un juego más difícil de explicar que de jugar. La ventaja es que no hace falta ser un experto para ser jugador: es suficiente con que el director de la partida conozca por encima las reglas del juego, y les diga a los jugadores cuándo tienen que tirar dados y cómo comprobar si sus ideas tienen éxito. Cada jugador tendrá una ficha que describa las habilidades y debilidades del personaje que interpretará.
¿Empezamos con un ejemplo? Será lo mejor. Supongamos que tenemos varios jugadores, que interpretan a un guerrero, un mercader, una maga, y en tu caso, pongamos que un rastreador. El director os cuenta que estáis en una gran plaza, y que un hombre está gritando en busca de ayuda. Necesita un grupo de aventureros que le ayuden a rescatar a su amada, capturada por unos salteadores de caminos.
Entonces el jugador que interpreta al guerrero dice “Hum, me interesa, siempre que haya dinero, así que le pregunto al tipo que si hay recompensa”. El director le comenta que el hombre, con naturalidad, responde que sí. Pero el mercader sospecha algo, y anuncia que va a usar sus artes de negociador para ver si descubre algo más. Tira un dado, suma su habilidad en negociación, y el director le dice que tiene éxito…
Pues sí, el tipo negocia como si fuera con mercancía, comenta el director, así que el mercader entiende que puede haber gato encerrado. La maga plantea al resto la opción de lanzar un hechizo que obligue al tipo a decir la verdad. Y como rastreador, ¿qué podrías proponer tú? ¿Quizás esperar a que el hombre se marche y seguirle? ¿Alguna idea mejor?
Lo bueno de este juego es que hay montones de sistemas de reglas gratuitos, muy simples para empezar, con casi infinitas aventuras ya diseñadas, y ambientadas en mundos medievales, fantásticos, futuristas, renacentistas, de espionaje… lo que se te ocurra. Una partida puede ser tan larga como los jugadores quieran, e incluso puedes encadenar varias dentro de una campaña.
En ZonaFandom publiqué un par de artículos más detallados sobre qué son los juegos de rol y cómo empezar a jugar a rol. En AhorroDiario me centraré en recomendaros juegos sencillos y gratuitos con los que descubrir este fascinante entretenimiento, que seguro que hará las delicias de todos los que lo probéis.
Imágenes | Civi y Pablodf
En AhorroDiario | Juegos y pasatiempos baratos para el fin de semana
En ZonaFandom | Los Juegos de Rol: ¿Qué son y por qué apasionan?, Los Juegos de Rol: ¿Por donde empiezo?